¿Qué significa ser nutricionista en Casa de Estancia Pittier?

Como nutricionista de Casa Estancia de Pittier, me encargo de realizar dos trabajos. Por un lado, realizo la evaluación nutricional de cada adulto mayor que ingresa, así como el seguimiento de su evolución. Por otro lado, dirijo el Servicio de Alimentación.

Los pacientes que ingresan a Casa Estancia normalmente presentan algún tipo de demencia, asociado a otras patologías como, por ejemplo: hipertensión arterial, diabetes, dislipidemia, enfermedad renal crónica, enfermedad hepática, Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), por lo que, el manejo nutricional es fundamental.

Cuando ingresa un paciente, la valoración nutricional es sumamente importante, ya que se realiza el diagnóstico del paciente y a partir de ahí, se establecen los objetivos y necesidades para su tratamiento terapéutico.

Cabe mencionar que, un alto porcentaje de los pacientes que ingresan a Casa Estancia, vienen con algún grado de desnutrición o riesgo de desnutrición, por lo que, nuestra mayor preocupación es que, el paciente coma y mejore su estado nutricional.

Por esto, mes a mes se toman medidas antropométricas y se mide el impacto que está teniendo el tratamiento.

Normalmente coordino con enfermeras, médicos, asistentes y cocineros para que, una vez que se establece el tratamiento nutricional, se sigan las indicaciones especiales de cada paciente.

También tengo estrecha comunicación con la fisioterapeuta, la cual valora a los pacientes y me da el visto bueno para poderlos pesar, ya que, en ocasiones los pacientes vienen con su masa muscular depletada por lo que, no es conveniente ponerlos de pie sin antes recibir terapia, o que vienen de cirugía de cadera y requiere reposo y un proceso de rehabilitación para poder pesarlos en la balanza.

La buena nutrición es fundamental en las personas mayores.

Es frecuente que se den problemas de deglución. Cuando esto sucede, es necesario modificar la textura de los alimentos, para disminuir el riesgo de broncoaspiración, así como, darle confort al paciente, para que se sienta seguro a la hora de comer.

Algunos pacientes no logran deglutir los líquidos por lo que, se les debe brindar líquidos de diferente textura, dependiendo de la progresión de la enfermedad.

Algunos toleran los líquidos tipo néctar, miel o pudin.

Sin embargo, lo importante es detectar a tiempo este tipo de cambios que va sufriendo el paciente, para poder adaptar la alimentación.

Otro aspecto importante tiene que ver con la hora de comer.

Resulta que, muchas veces, creemos que los pacientes no quieren comer porque dejan de lado el plato.

Sin embargo, por sus patologías, es frecuente que a estos pacientes se les olvide que están comiendo, o empiezan a tener dificultad en su motora gruesa, para llevar la cuchara a la boca, por lo que, se deben asistir a la hora de la alimentación, de lo contrario pueden empezar a perder peso.

Es muy importante la comunicación entre todas las partes involucradas en el cuidado del adulto mayor.

Los asistentes que están a cargo de brindar los alimentos a los usuarios son una pieza clave a la hora de comunicar los cambios observados en algún paciente.

Por ejemplo, algunas veces un paciente no quiere comer y resulta que es porque, le duele una muela.

Otras veces tienen problemas con sus prótesis dentales, está iniciando un proceso infeccioso o está deprimido.

Un aspecto importantísimo es, el trabajo en equipo, especialmente con el departamento de enfermería, ya que, debemos procurar que los pacientes mantengan controladas sus glicemias y presión arterial.

Al mismo tiempo, es ideal disminuir la frecuencia de aparición de infecciones del tracto urinario y respiratorio.

También se trabaja en disminuir la aparición de úlceras por presión, en caso de que un paciente ingrese con una, se trabaja en que sane lo más pronto posible.

El departamento de enfermería y nutrición deben de estar en constante comunicación en conjunto con el médico tratante y los asistentes.

A lo largo del tiempo que tengo de trabajar en Casa Estancia de Pittier, me he dado cuenta de que es importantísimo conocer a cada paciente, sus gustos, preferencias, hábitos y complacerlos.

Algunos pacientes tienen su desayuno predilecto y este no se les puede variar. Otros usuarios no les gusta el pescado y se les respeta. El día que hay pescado se les prepara otra comida.

En general, para aumentar el apetito y promover que los pacientes consuman sus alimentos, debemos asegurarnos de servirles lo que les gusta, igual como si estuvieran en casa.

Así que, esto me lleva a hablar de la otra parte de mi trabajo en Casa Estancia, que es dirigir el Servicio de Alimentación.

Específicamente, elaboro el ciclo de menú y realizo los pedidos a los distintos proveedores.

El ciclo de menú de un centro de adulto mayor debe ser nutritivo, variado y equilibrado.

También, por el tipo de pacientes que tenemos, debe ser un menú donde la mayoría de las preparaciones sean suaves y mojadas, es decir, que por lo general haya una salsa o caldo para que no sea una comida muy seca, que se les dificulte consumirla.

No puede haber trozos grandes ni huesos.

Aparte del menú normal, se debe hacer dieta tipo papilla y dieta licuada para los pacientes que tienen problemas de deglución o que son edéntulos.

También tenemos pacientes que, por sus patologías ya no pueden consumir alimentos vía oral, así que, se les maneja la alimentación:

• Vía Sonda Nasogástrica (SNG)
• Gastrostomía Endoscópica Percutánea (PEG)

Según indicación médica, por lo que, también se elaboran licuados artesanales nutritivos para pasar por SNG o PEG.

Para mí no hay satisfacción más grande que, un paciente de Casa Estancia me diga que estaba deliciosa la comida, que la ha disfrutado mucho.

Esto unido a, ver la mejora en el estado de salud de dicho paciente, el aumento de peso al final del mes, la disminución en la frecuencia de infecciones y la cicatrización de heridas y úlceras.

Para mí, esto es lo más importante de todo, ver como la nutrición incide directamente en el bienestar de los adultos mayores.

Me siento afortunada por dedicar una parte importante de mi trabajo a este grupo de la población.

Dra. María Fernanda Zumbado Murillo. Nutricionista, cód.815-11